Mi pequeña necesitaba ayuda para dar una lección de historia. Viene y me lee los títulos, subtítulos, y cada elemento paratextual para darme una idea de la cantidad que comprende el contenido del libro para su lección oral. Claramente se siente un poco abrumada. En ese momento me viene a la mente una frase del gran maestro Pai Mei cuando le estaba tratando de enseñar una lección a Beatrix Kido mientras golpeaba una gruesa tabla de madera: "Tu puño no debe temerle a la madera, la madera debe temerle a tu puño". O algo así, en la peli de Tarantino Kill Bill. Cambiando las palabras, dije: "El libro no te va a comer, no le tenés que tener miedo. El libro tiene que tenerte miedo a que vos te lo comas". Me miró con cara de mal chiste y le dió un mordisco al libro. Y ahí estuve, dando soporte. Sobre todo para que no se quede sólo con una frase pelotuda de su viejo. Al final creo que yo estoy listo para la dar lección.